Los Warriors hacen saltar la banca con las renovaciones de Jordan Poole y Andrew Wiggins

Alguien parece haberse vuelto loco en San Francisco. Ayer se hicieron públicas las renovaciones de Jordan Poole y Andrew Wiggins por los Warriors. Cuesta imagina cómo se va a pagar todo eso con un impuesto de lujo disparado hasta límites incréibles.

Jordan Poole renovó por cuatro años más y la friolera de 140 millones de dólares (123 + 17 en primas). Un poco más tarde se dio a conocer que Andrew Wiggins extendía su contrato por cuatro años más y 109 millones de dólares.

En un día como hoy, en el que se cumplen 13 años de la muerte de Andrés Montes, el inolvidable narrador seguro que estaba hablando de Los Reyes del Crudo o algo así.

Poole aún tenía un año más de contrato por una cantidad ridícula, comparada con lo que acaba de firmar. El escolta percibirá 3,9 millones de dólares por la 2022-23. Su nuevo contrato parece una auténtica barbaridad: 31,25 millones en la 2023-24; 33,75, en la 24-25; 36,25, en la 25-25; y 38,75, en la 26-27.

En cuanto a Wiggins, el alero ya tenía comprometidos 33,6 millones de dólares para este curso que está a punto de empezar. En su caso, los poco más de 27 millones por año sorprenden algo menos en un jugador que ya viene de recibir un pastizal tremendo en su último contrato.

Ahora mismo se estima que entre salarios e impuesto de lujo, los Warriors tendrán que pagar unos 483 millones de dólares. Una cifra marciana. ¡Bienvenidos al club!