El Oracle Arena, patas arriba

Los Warriors siguen ganando adeptos para su causa por su juego, sus maneras y su tesón. Anoche superaron a los Spurs por 97-87 en la prórroga de un partido trepidante y lleno de emoción. Steph Curry sigue con sus problemas físicos, pero 'andando' se fue a 22 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias.

Con Curry tocado, la importancia de Jarrett Jack aumenta de manera clara, y el base-escolta volvió a estar a la altura de un compromiso de la máxima responsabilidad. Jack firmó un partido sobresaliente con 24 puntos, 7 rebotes y 4 asistencias saliendo del banquillo.

Pero Jack y Curry no estuvieron solos. Harrison Barnes no estuvo fino en el tiro (9 de 26), pero fue vital en algunos momentos muy importantes del partido y terminó con 26 puntos y 10 rebotes. Andrew Bogut firmó un gran partido atrás, con acciones de mérito sobre Tim Duncan en defensa y firmó una estadística 'muy Reggie Evans': 5 puntos, 18 rebotes y 1 tapón. Klay Thompson no ofreció su mejor versión (10, 4, 2 y 3 robos), pero al igual que Carl Landry (6, 5 y 4) tuvieron mucha importancia con acciones decisivas al final.

En los Spurs, Manu Ginóbili (21, 4, 3 y 3 robos), Tim Duncan (19, 15 y 2 tapones), Tony Parker (17, 4 y 3), Kawhi Leonard (11 y 8) y Danny Green (10 y 7) no fueron capaces de resolver el partido y vieron como el rival les igualaba la serie 2-2.