Macedonia, el triunfo de la fe

Uno ve a Macedonia y así, de primeras, apenas aprecia la calidad de McCalebb, el liderazgo de Pero Antic jugando ¿de point center?, un poco de Vojdan Stojanovski y algún destello de Ilievski. La brillantez, salvo en algunas acciones de Bo no parece el sello característico. Pero este equipo tiene fe infinita en sus posibilidades y así lo pudo comprobar Lituania, que ahora sólo luchará por obtener una plaza en el Preolímpico.

Sin duda una gran decepción la de los anfitriones, pero es que ayer Macedonia no se rindió nunca. Por detrás en el marcador, agazapados, no parecían capaces de ponerse por delante en el marcador, pero tampoco dejaban irse al rival.

Stojanovic aguantaba al equipo con su acierto desde el triple. Pero Antic no tenía su día, pero luchaba hasta la extenuación, lo mismo que Samardziski y Checovski, peones de brega infatigables.

A Lituania le entró el miedo a ganar, y McCalebb se fue en dos ocasiones hacia el aro en esas penetraciones casi imparables de este gran base. El partido estaba loco perdido y todo parecía posible, pero un triple de Ilievski a 11 segundos para el final apuntilló a los locales, incapaces de reaccionar y desacertados en sus acciones.

Macedonia daba la sorpresa y dejaba en ridículo a Francia y sus infantiles cábalas. Ahora espera España. Pero que nadie se piense que será fácil. Caer en el triunfalismo puede pagarse muy caro.

Macedonia (18+12+19+18): 67. Ilievski (12), McCalebb (23), Antic (8), V. Stojanovski (15) y Samardziski (7) -equipo inicial-, Sokolov, D. Stojanovski y Checovski (2).

Lituania (20+14+18+13): 65. Kaukenas (6), Kalnietis (9), Songalia (12), Jasaitis (9) y Javtokas (13) -equipo inicial-, Pocius (2), Jankunas (4), Valanciunas (3), Lavrinovic y Jasikevicius (7).