Las lágrimas de un campeón
¿Por qué Pau es el más grande?
"Tan de valientes corazones es, señor mío, tener sufrimiento en las desgracias como alegría en las prosperidades". Así habló Sancho Panza tras ver a su amo derrotado. Y esa imagen me vino a la cabeza cuando vi a un Pau Gasol lloroso por la emoción de ver a su equipo en la final, y roto por el dolor y por el conocimiento de la gravedad de su lesión. Años de lucha y sacrificio (cediendo sus vacaciones en pos de una causa) que dan sus frutos, y él que no podrá hacer lo que más le gusta en el partido decisivo: demostrar que es un ganador.
Pau, todo tesón, todo entrega, todo corazón abandonaba el partido más importante de su vida con un hueso del pie maltrecho. Pedía el cambio a la banda, pero su siempre impecable actitud le llevó a permanecer en la pista, a meter dos tiros libres claves y luego a dar el relevo a Rudy Fernández. Gasol asumió la responsabilidad hasta el final de sus posibilidades en su enésima demostración de compromiso con una causa: llevar a España a lo más alto, a una gran final de un Mundial. ¡Objetivo cumplido!
El equipo está por encima de todo y el de Sant Boi lo sabe. Lo sabe mejor que nadie, por eso cada vez que le vemos sobre el parqué nos engancha más. El ego de Pau no existe. Existe su generosidad sin límite.
Ante Grecia le echaremos de menos, pero sabemos que el que salga lo dará todo por el bien del grupo. Parece que el mal estado de ese quinto metacarpiano no permitirá a Pau ejercer de Willis Reed en versión del siglo XXI. Da igual, su presencia en el banquillo debe suponer ese punto de inspiración para el compañero; ese espejo en el que mirarse para alcanzar la gloria; y el compromiso de 11 jugadores que tienen que devolverle lo que él siempre da al cien por cien: un espíritu ganador y solidario.
Hace poco (en una entrevista que nos concedía para Vogue, publicada en el número de agosto), al preguntarle por sus objetivos, Pau nos decía que le gustaría "optar al título de la NBA en alguna ocasión. Y con la selección quiero conseguir medallas, a poder ser de oro". Le comentábamos cómo veía las opciones de España en Japón, a lo que nos respondió: "Creo que podemos hacer algo importante. Tenemos un buen equipo, muy competitivo y con talento, pero siempre hay varios equipos que van a ser difíciles de batir". Él lo tenía claro, por algo siempre ha destacado por su clarividencia y buena cabeza.
Pau, tus lágrimas tras derrotar a Argentina te ennoblecen. Y nuestra admiración hacia tu persona sólo conoce una trayectoria: siempre ascendente, siempre hacia arriba.
"Tan de valientes corazones es, señor mío, tener sufrimiento en las desgracias como alegría en las prosperidades". Así habló Sancho Panza tras ver a su amo derrotado. Y esa imagen me vino a la cabeza cuando vi a un Pau Gasol lloroso por la emoción de ver a su equipo en la final, y roto por el dolor y por el conocimiento de la gravedad de su lesión. Años de lucha y sacrificio (cediendo sus vacaciones en pos de una causa) que dan sus frutos, y él que no podrá hacer lo que más le gusta en el partido decisivo: demostrar que es un ganador.
Pau, todo tesón, todo entrega, todo corazón abandonaba el partido más importante de su vida con un hueso del pie maltrecho. Pedía el cambio a la banda, pero su siempre impecable actitud le llevó a permanecer en la pista, a meter dos tiros libres claves y luego a dar el relevo a Rudy Fernández. Gasol asumió la responsabilidad hasta el final de sus posibilidades en su enésima demostración de compromiso con una causa: llevar a España a lo más alto, a una gran final de un Mundial. ¡Objetivo cumplido!
El equipo está por encima de todo y el de Sant Boi lo sabe. Lo sabe mejor que nadie, por eso cada vez que le vemos sobre el parqué nos engancha más. El ego de Pau no existe. Existe su generosidad sin límite.
Ante Grecia le echaremos de menos, pero sabemos que el que salga lo dará todo por el bien del grupo. Parece que el mal estado de ese quinto metacarpiano no permitirá a Pau ejercer de Willis Reed en versión del siglo XXI. Da igual, su presencia en el banquillo debe suponer ese punto de inspiración para el compañero; ese espejo en el que mirarse para alcanzar la gloria; y el compromiso de 11 jugadores que tienen que devolverle lo que él siempre da al cien por cien: un espíritu ganador y solidario.
Hace poco (en una entrevista que nos concedía para Vogue, publicada en el número de agosto), al preguntarle por sus objetivos, Pau nos decía que le gustaría "optar al título de la NBA en alguna ocasión. Y con la selección quiero conseguir medallas, a poder ser de oro". Le comentábamos cómo veía las opciones de España en Japón, a lo que nos respondió: "Creo que podemos hacer algo importante. Tenemos un buen equipo, muy competitivo y con talento, pero siempre hay varios equipos que van a ser difíciles de batir". Él lo tenía claro, por algo siempre ha destacado por su clarividencia y buena cabeza.
Pau, tus lágrimas tras derrotar a Argentina te ennoblecen. Y nuestra admiración hacia tu persona sólo conoce una trayectoria: siempre ascendente, siempre hacia arriba.
posted by Peter Mihm at 5:31 p. m.
10 Comments:
Muy emotivo Peter. Yo creo que mañana la fuerza del conjunto que ha demostrado la selección a lo largo del campeonato permanecerá, a pesar de la ausencia del lider, inalterable.
Creo que Navarro, Garbajosa y Rudy van a salirse...
Esperemos porque navarro estuvo desconocido... una lastima lo de pau pq es el que mas se merece jugar una final, pero todos le apoyamos
Todos lo tenemos muy claro. Sabemos que los que salgan van a vaciarse en la cancha. Esperemos que sea Navarro y Garbajosa ejerzan de líderes y estén atinados; que sea el día de Mumbrú, de Rudy, de Reyes, de todos...
Cuentan con nuestro apoyo incondicional Y estaremos con ellos a las duras y a las maduras. ¡¡SUERTE!!
si señor, este pau es un jugadorazo como la copa de un pino.
para mañana espero que destaquen navarro, garbajosa, y no en anotacion, pero si en una buena direccion, calderon. con un rudy en grandisima forma
Ya estoy nervioso, pero pienso disfrutar ya que lo que venga ya es un premio
Ahí estamos Litros. La plata ya me sabe bien, pero queremos el oro...
PAU PRESIDENTE YA!!! VITALICIO!!!
Qué conste que escribí esto el sábado al ver confirmado que Pau no jugaría la final. La deuda con Gasol es eterna. ¿Cómo se le puede devolver todo lo que le debemos?
Hola Peter, de verdad suscribo al 100% lo de Pau.Es el mejor deportista que tenemos ahora mismo. A mi me fascina todo de él, ¿como se puede ser tan grande y a la vez tan humilde, educado y respetuoso?Es un ejemplo como deportista y como persona, para todos los niños y para los que no somos tan niños. Disafrutemos de su presencia mientras podamos. El Rey de Memphis, El Rey de la Seleccion
Hola King Zulu. Suscribo lo que dices punto por punto: gran deportista, buena persona, amable, sencillo, educado, con los pies en el suelo. En mí tiene a un fan declarado.
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