Los Mavs cumplen con su parte del guión

Los Mavs ganaron el quinto partido de la Final de la NBA y colocan el 3-2 en la serie. Ahora, quedan dos partidos, los dos en Miami, pero Dallas tiene margen, los Heat, no. El partido de anoche se disputó en el escenario que más le gusta a los texanos, partido de elevada anotación (112-103), rápido y con acierto en el tiro exterior (13 de 19 en tiros de tres).

Carlisle volvió a apostar por un quinteto inicial con dos bases puros y le salió bien. Dirk Nowitzki volvió a ser el alma del equipo con 29 puntos y 6 rebotes. Pero detrás de él hubo más gente aportando. Jason Terry logró 21 puntos (8 de 12 y 3 de 5 en triples). J.J. Barea se fue a 17 puntos (6 de 11 y 4 de 5 en triples) y 5 asistencias. Jason Kidd añadió 13 y 6 asistencias. Y Tyson Chandler terminó con 13 puntos y 7 rebotes. Marion no tuvo su mejor noche, aunque aportó 8 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias y un buen trabajo global.

En los Heat, el mejor fue Wade, pero Flash estuvo ausente durante parte del encuentro por un golpe en el cadera con Cardinal en el primer cuarto. Aún así el escolta terminó con 23 puntos y 8 asistencias. LeBron James obtuvo un triple doble con 17 puntos, 10 rechaces y 10 pases de canasta, pero el logro se queda en anécdota por la derrota. Chris Bosh estuvo sólido con 19 puntos y 11 capturas. Mario Chalmers (15 y 4), Udonis Haslem (10 y 5) y Mike Miller (9) echaron una mano, pero no era la noche de los Heat.

Como en casi todos los partidos de la serie éste fue igulado, con pequeñas ventajas de los locales. En el comienzo del cuarto definitivo, Dallas llegaba a mandar hasta por 7 puntos (88-81), pero los Heat fueron capaces de dar la vuelta y ponerse con 95-99 con poco más de cuatro minutos por jugarse. Pero ahí surgieron los de siempre. Dirk Nowitzki metió dos tiros libres y un mate. Jason Kidd anotó un triple vital y dos tiros libres. Y Jason Terry se disfrazó de asesino y enchufó dos triplazos y dos tiros libres ante los que Miami se quedó sin respuestas en medio del delirio de la afición del American Airlines Center.

Ahora, la serie vuelve a Miami. La tradición dice que el que llega al sexto partido con 3-2 a su favor se convierte en campeón. Pero ese no fue el caso de los Celtics el año pasado... En la madrugada del domingo al lunes, próximo episodio.